Honor, servicio, dignidad, compatriota... Palabras en peligro de extinción.

Yo no soy historiador, pero conozco un poco de historia...
Antes estas palabras, honor, servicio y compatriota, estaban en la boca de los buenos políticos. Trabajaban para el pueblo. ¿Qué ha pasado? Observando por internet y televisión los acontecimientos pasados durante esta semana, el motín en el capitolio, la inauguración de la ruta 66 y todo lo acontecido con el deporte número 1 en Puerto Rico, la política, me confirman que éstas palabras están en peligro de extinción. Se ha perdido el honor porque ya no entendemos que algunos edificios, sin importar los burros, simios y jirafas que trabajan adentro, tienen un valor importante en nuestra historia y sociedad. ¿Porqué entonces tengo que entrar a romper obras de arte y dañar interiores del edificio de las Leyes en Puerto Rico? Yo no se quién es el Cubano al que la Legislature le regaló un homenaje, aquí tenemos otra fallo del honor, el cual se dice que no merecía por asociarse con políticos corruptos, pero entiendo que no había necesidad de entrar a la fuerza al Capitolio de la manera que lo hicieron. Veo y observo que la dignidad de este país se ha ido con los panchos... El servicio se a redefinido a acción para beneficiar a quien me conviene y a mi bolsillo solamente y que los que votaron por mi que se ¡jodan! (Disculpen mi francés, es que la decepción es mucha). Observando la situación objetivamente, y repito objetivamente, el gobernador está tratando de hacer algo bien, no se del resto, pero algo esta haciendo. ¿Qué hacen los demás, de todos los partidos por igual? Tengo una de varias respuestas, hechandose fresco en las .... mientras gastan dinero en cosas que no son esenciales ni prioridad para este país. Y te preguntarás que yo pienso que son las prioridades para este país... pues 1. la educación, 2. servicios básicos, salud, economía, 3. seguridad. Entonces compatriota.... palabra que se usa mucho, bueno, se usaba mucho entre los independentistas, adjetivo que TODOS debemos utilizar sin importar los ideales políticos, se ha desvirtuado hasta convertirla en terrorista. Personas enmascaradas dispuestas a todo, inclusive a matar a sus propios compatriotas, porque simplemente los burros del capitolio no hacen lo que está bien.... Escuchando en la radio un supuesto compatriota hablaba de que deberían sacar a todos del capitolio y poner a la gente del pueblo y caseríos a trabajar por el pueblo. El locutor le indica que lamentablemente los que están en el capitolio fueron electos por el pueblo y le pregunta si el vota. La contestación fue que no vale la pena. ¿Cómo puedo llamarme compatriota si ni siquiera participo del mayor evento democrático en el que somos partícipes? Tenemos que empezar por votar... y hay varias maneras para dejar sentir nuestro enojo... mi favorita es dejar la papeleta en blanco. de un millón de votantes que ejercen su voto si un 30% por lo menos deja la papeleta en blanco es un mensaje contundente a los políticos. Pero esta utopía solo la compartimos unos cuantos verdaderos compatriotas. Mi mejor arma no es una piedra ni una pistola... es la PALABRA.
Estoy haciendo campaña para que estas palabras no desaparezcan y que por medio de nuestro ejemplo podamos ser ajentes de cambio en nuestra sociedad que tanto lo necesita. ¡Que alguien se ponga de pie.... que alguien de la cara! Nosotros tenemos el poder y las herramientas de acabar esta debacle... ¡El pueblo no debe tenerle miedo al gobierno, el gobierno debe tenerle miedo al pueblo! (V for Vendetta)